sábado, 26 de diciembre de 2015

¡Hola Sol!

Imagen de pixabay.com

El sol es la fuente de energía que recarga a nuestro planeta y a todos los que lo habitamos pero a la hora de exponerse a el hay que tener mucho cuidado.
Debido a que los rayos ultravioleta (UV)  se relacionan con la producción de cáncer desde hace varias décadas se ha buscado la manera de evitar estos efectos sin necesidad de permanecer todo el tiempo a la sombra, y la herramienta más útil hasta ahora son los protectores solares que cada vez son más usados por los adultos pero esa frecuencia no se ve reflejada en los más pequeños quienes son los que más lo necesitan.
Y ¿por qué?
Porque la exposición a los rayos UV durante los primeros 20 años de vida son los que más se relacionan con la aparición de los distintos tipos de cáncer de piel, especialmente con el melanoma que de ellos es el de peor pronostico.
En general los protectores solares deben usarse diariamente en suficiente cantidad (15 cc en los niños y 30 cc en los adolescentes)en las áreas expuestas y reaplicarse cada 4 horas o antes si la niña ha sudado mucho o se ha metido al agua. Hay quienes piensan que puede evitarse su uso si estando en playa están bajo una sombrilla, esta creencia es peligrosa ya que tanto el mar como la arena pueden reflejar la luz y de esa manera quienes se sienten protegidos por la sombra pueden sufrir quemaduras solares, algo similar piensan quienes permanecen en lugares situados a gran altura porque tienen clima frío y asumen que las bajas temperaturas son fotoprotectoras, lo cierto es que  la capa de ozono es más delgada en esas zonas geográficas aumentando la radiación hasta 10% por cada 1000 mts de altura, otro mito a desmentir es que dentro del agua no hay riesgo alguno: los rayos UV penetran entre 50 y 60 cms por debajo de su superficie. Por más practico que nos parezcan los productos que tienen protector solar y repelente lo mejor es comprarlos por separado ya que el primero hay que usarlo varias veces, mientras que el segundo que es tóxico no. 
En resumidas cuentas no sólo en esta epoca de vacaciones sino SIEMPRE:
  • Debe aplicarse protector solar con SPF de 30 o más a partir de los 6 meses de edad.
  • En bebés menores de 6 meses la protección debe hacerse con ropa y sombrero evitando a toda costa exponerlos a luz solar directa después de 10 am.
  • Mantener una buena hidratación, evitando los citricos por el riesgo de fitofotodermatitis.
  • Hacer especial énfasis en algunas áreas como: nariz, pómulos, orejas, cuero cabelludo cuando no hay cabello abundante, pecho y hombros.
  • Reaplicar el numero de veces que sean necesarias. 
  • Verificar la fecha de vencimiento del producto y saber que así no esté vencido si fue abierto hace más de 1 año debe desecharse. 
Ahora si: ¡a disfrutar del sol!

P.D: recuerden que los juguetes y todas sus aplicaciones no son más que accesorios, que lo que quedará grabado en el corazón de sus hijas e hijos es el juego que compartieron con ustedes.

jueves, 10 de diciembre de 2015

El cromosoma del amor.

Imagen de pixabay.com 
“…Al principio, no había nada de nada. Sólo se oía la música.… El primer día hizo el Sol…El segundo día hizo el agua. .. Después hizo el viento… El tercer día hizo el pasto. Cuando lo cortas grita, le duele… El cuarto día hizo las vacas… El quinto día hizo el avión. Si no lo tomas, puedes verlo pasar. El sexto día hizo a la gente…El séptimo día para descansar hizo las nubes. Si las miras mucho tiempo ves dibujadas todas las historias. Entonces se preguntó si no faltaba nada…El octavo día hizo a George. Y vio que era lindo…”
Película “El octavo día” sobre la vida de George quien tiene Síndrome de Down.


El titulo es tomado de una de las clases que recibí cuando roté por pediatría en el pregrado, la cual era dictada por la entrañable Dra. María Elena Bustillo. 


El Sindorme de Down (SD) es una condición genética causada porque en vez de tener 2 cromosomas 21 se tienen 3, por eso también se conoce como trisomía 21. Ese cromosoma de más causa una serie de características externas e internas, las primeras son las que hacen que fácilmente sea sospechada incluso desde que se está en el vientre materno: ojos rasgados, puente nasal ancho, orejas de implantación baja entre otras, pero el diagnostico SIEMPRE debe confirmarse a través de un estudio llamado cariotipo que finalmente dirá si hay o no un cromosoma 21 de más. En los casos en que el cariotipo inicial es normal pero se sigue sospechando que tiene el sindrome de Down hay que repetirlo pero en 30 células ya que puede ser algo llamado mosaicismo, esto quiere decir que sólo una parte de las células del cuerpo tienen la trisomia.

¿Eso le pasa sólo cuando la mamá tiene más de 35?

Es cierto que la edad materna por encima de los 35 aumenta las probabilidades de tener un hijo con SD, pero la mayoría de los pacientes son hijos de madres jóvenes debido a que las mujeres por debajo de los 30 años se embarazan más frecuentemente, pero además el síndrome también puede ser causado por una alteración cromosómica llamada translocación que no tiene ninguna relación con la edad materna y que según el tipo que sea puede llevar a que la probabilidad de tener otra hija con SD sea de hasta el 33%, mientras que en las familias donde la causa es la edad de la madre esa probabilidad es de 1-2%.

Esa es otra de las razones por las cuales es tan importante hacer el cariotipo y remitir a los padres a consejería genética, de tal forma que puedan saber con claridad si hay probabilidades altas de tener otro hijo con esa condición. 

Aja doctora y luego ¿qué hacemos?

Un niño con síndrome de Down es ante todo un niño, entonces debe asistir a los controles pediátricos de forma regular, pero estos deben ser más frecuentes y no solo enfocados en el crecimiento y desarrollo sino además a manejar las condiciones especiales que conlleva como la hipotonía o a diagnosticar tempranamente las complicaciones que pueden aparecer como el hipotiroidismo, sin olvidar que el sólo diagnóstico aumenta la posibilidad de otras patologías, además ser el lider del equipo multidisciplinario que lleve a que la niña tenga todas las herramientas necesarias para estar incluida en la sociedad y llegue a valerse por si misma.